Por David Alma, Herbolario en Herboristeria Plaza Real en Lorca

En este artículo vamos a hablar de la Curcubita máxima Duch, conocida como ahuyama o zapallo y solicitada en herboristerías como pepitas de calabaza, que es en realidad lo que son. Aunque clases de pepitas hay muchas, la variante “máxima” y “pepa” son las más trabajadas seguidas de la “siceraria”, la “mostacha”. Todas ellas en realidad pertenecen a la familia de las Cucurbitaceae y son los nombres de las plantas trepadoras de origen americano, cuyo tallo endeble, hueco y áspero se extiende por el suelo para florecer en flores amarillas y dar un fruto grande de hasta 30 kg de peso que se coge en otoño y conocemos como calabaza. Este fruto es originario de América del Sur donde se desarrolló de manera silvestre y fue consumido por la cultura Mochica en el Perú. Hoy en día se cultiva extensamente en las regiones templadas y subtropicales de todo el mundo.

Lo más interesante de la calabaza en la fitoterapia son sus semillas, que contienen una pulpa rica en aminoácidos, omega 3 y 6, zinc, calcio, hierro, magnesio, fósforo, potasio, selenio, vitamina A, E y C; entre más nutrientes como la zeaxantina que protege a las mucosas oculares y el betacaroteno muy beneficioso para la piel.

En la dispensación medicinal, el mayor reclamo de esta prímula obtenida de las semillas es el tratamiento de la próstata. Sus alto nivel de Omega 3 y Omega 6 junto con los elevados valores de zinc, hacen que se fortalezca esa válvula que se afloja en la vejiga y ocasiona molestias y pérdidas de orina. Sin embargo, su consumo diario y terapéutico se extiende a multitud de órganos y sistemas de nuestro cuerpo aportando multitud de beneficios. Estimula la función del páncreas ayudando a regular los niveles de azúcar en la sangre. Colabora en la eliminación de mucosidad pulmonar, bronquial y residual de la garganta. Fortalece el sistema inmunológico activando las defensas. Disminuye el riesgo de padecer cáncer de próstata y enfermedades cardiacas, ya que regula la hipertensión arterial en combinación con el Espino Blanco. Sus omegas son limpiadores de la sangre que disminuyen el colesterol alto y crónico. Y en el intestino actúa como vermífugo, aplacando las temibles lombrices o gusanos intestinales si se combina con perlas de ajo. También en procesos de infertilidad masculina incide en el aumento de la testosterona y su regulación hormonal constante, convirtiéndose en un estupendo aliado que aumentará la tasa de esperma fértil. En el tratamiento del acné, cuando se combina con una planta llamada Bardana, es un excelente limpiador de grasas de la sangre y regula las secreciones seborreicas de los poros. Y por último, su consumo durante los meses de septiembre, octubre y noviembre tanto en hombres como en mujeres ayuda a prolongar el bronceado durante más tiempo en la piel.

A modo de curiosidad os contaré que el consumo de calabaza no se basaba en la pulpa sino en la simiente, ya que la pulpa o carne era áspera, y las semillas en cambio eran tiernas y dulces; o con un secado o tueste adquirían un sabor más agradable. Poco a poco la pulpa fue introduciéndose en los platos culinarios. La calabaza es el fruto esculpido por excelencia y utilizado en la noche de Hallowen, fiesta tradicional norteamericana, para infundir miedo pero en realidad su significado es señalar el camino a casa a los difuntos queridos. En realidad la fiesta es originaria de la cultura celta y el vínculo exacto se haya en un viejo cuento popular irlandés que narra la historia de “Jack”, el tacaño que logró engañar al diablo dos veces. En España se vinculan frases populares a este fruto: “dar calabazas a alguien” o “sacar calabazas en un examen”. Y un programa mítico español, el “Un, dos, tres”, usó la calabaza como reclamo, llamándola “Ruperta”. Hoy en día la calabaza tiene innumerables recetas al más alto nivel culinario desde entrantes, sopas, salsas, primeros platos y postres…

Espero que las semillas de calabaza os sean útiles en vuestra salud. Las tenéis disponibles en Herboristería de Plaza Real en Lorca, tanto en perlas como en semillas, donde os atendemos como siempre. ¡Un gran abrazo a todos, amigos, y Carpe Diem!.