VALERIANA

Por David Alma, Herbolario en Herboristeria Plaza Real en Lorca

Fuente fotografica. commons.wikimedia.org
Fuente fotografica. commons.wikimedia.org

En este artículo vamos a hablaros de una planta básica y antigua en las herboristerías: la Valeriana oficinalis, conocidísima por todos, aunque posee otros nombres como hierba de los gatos, alfeñique o hierba bendita. Pertenece a la familia de las Valerianáceas y se conocen de ella más de 350 especies que crecen preferiblemente en bosques y márgenes de ríos o zonas umbrías de Europa, Asia y América. Se trata de una planta de tallo erecto y robusto, hojas pinnadas y flores de color blanco y rosáceo. Su época de floración se da entre primavera y verano.

 

Sobre su uso medicinal destacamos sus principios activos que son el aceite esencial pineno y canfeno, entre otros alcaloides y jugos amargos que son los que dan como resultado su acción curativa sobre el sistema nervioso. Es sedante, ligeramente hipnótica, antiespasmódica, hipotensora y carminativa.

 

La Valeriana es una de las plantas más solicitadas al herbolario para tratar procesos o alteraciones del sistema nervioso, ya que su acción es tranquilizadora. Se emplea sin riesgo alguno en casos de ansiedad, hiperexcitabilidad, ataques de histeria, insomnio, cólicos intestinales, tensión nerviosa… También se recurre a ella de manera combinada para tratar la migraña (Valeriana con Melisa o Lavanda). Desconocida es su aplicación para paliar dolores menstruales (con Artemisa)  y calambres (con Romero). Sin embargo, puede aplicarse a otras patologías como la enfermedad de Crohn o la intolerancia al gluten, ya que calma la tensión nerviosa acumulada en los intestinos disminuyendo los espasmos. Para personas con alteraciones en el sueño es también un remedio eficaz, ya que sus propiedades hipnóticas inducen al sueño dulce y apacible. Las personas con depresión tienen en la Valeriana una alternativa eficaz a la Hierba de San Juan o el Hipérico.

 

A modo de curiosidad, destacaremos que en la edad media, en la zona de Suecia era costumbre depositar bajo la ropa del novio un ramillete de Valeriana para evitar envidias. Su aroma era muy usado también en las iglesias medievales a modo de incienso para repeler el hedor de las multitudes y en Inglaterra para sazonar carne. La Diosa germánica Herta se representa con un ramillete de Valeriana. En Italia, existe una provincia llamada Valeria que significa estar sano y fuerte. Durante la I Guerra Mundial, fue un tratamiento muy útil para los combatientes aquejados de dolores de cabeza, mareos, palpitaciones, depresión… todo ello ocasionado por el estrés de la situación que les tocó vivir. Como decíamos al principio, es conocida como hierba de los gatos por la tendencia de este felino a rozarse con ella para impregnarse de su aroma. El aroma de la Valeriana se usó de señuelo para los ratones de la obra “El Flautista de Hamelín”. Otros usos curiosos son colocar Valeriana cerca de las colmenas para que las abejas no se alejen de ellas o también frotar a las lombrices con sus flores para atraer las truchas al cebo.

 

 

Espero que paséis unas Felices Fiestas de Navidad y ya sabéis que para cualquier consulta me encuentro en Herboristería de Plaza Real, en Lorca. ¡Recibid un fuerte abrazo y Carpe Diem!.