Por David Alma, Herbolario en Herboristeria Plaza Real en Lorca

De nuevo estoy con vosotros, amigos lectores y seguidores de Vivir en Lorca. En este artículo os daré unos consejos para disfrutar del Sol, ya que es tiempo de vivir el verano. La playa, la montaña, las piscinas... cualquier entorno y actividad son válidos para disfrutar de esta calurosa estación y desconectar. Pero hay que estar atentos y no bajar la guardia ante el Sol, sus efectos pueden dañar nuestra piel. ¡Y de que manera!.

Os voy a explicar brevemente como actúan los rayos del sol sobre nosotros. Están divididos en dos tipos de radiación ultravioleta: UVA y UVB. La radiación UVB quema la capa superior de la piel, que es la epidermis, causando las quemaduras e irritaciones. La radiación UVA es la que hace que las personas se bronceen, ya que penetra en las capas inferiores de la piel donde estimula a las células llamadas melanocitos para que produzcan melanina. La melanina es la pigmentación marrón que ocasiona el bronceado y además nos protege de posibles quemaduras. Pero solamente porque una persona no se queme con el sol o ya esté bronceada no significa que esté protegido ante diversos problemas de piel como dermatitis, manchas, quemaduras de diversos grados o hasta futuros cáncer de piel.

En el mercado hay muchos tipos de cremas y protectores solares de distintos grados de filtro en función de la dermis de cada persona. Independientemente de esta protección que es básica, pueden complementarse con vitaminas como la E+C+A que activan los mecanismos de defensa de nuestra piel y el conocido betacaroteno que nos previene de efectos cancerigenos y potencia nuestro bronceado. Las hay que también incluyen aloe vera. Y por supuesto para potenciar el bronceado comprimidos de Zanahoria con los que obtendréis resultados espectaculares.

Para concluir quisiera hablaros de la importancia de aplicar una crema hidratante y calmante tras la exposición solar. Leche o gel, por ejemplo, con las bondades que nos proporciona el aloe vera, a la que los egipcios la llamaban la planta de la inmortalidad, ya que contiene más de 160 sustancias diferentes como vitaminas, minerales, encimas entre muchas más y de la que os contaré más cosas en otro artículo. O también leche de caléndula y rosa mosqueta para niños y bebés. ¡La naturaleza es sabia!.

Así que recordad, para disfrutar del Sol, protección solar aunque ya estemos morenos. Y para después del sol, leche hidratante o gel de aloe vera sobre la piel o de manera interna jugo de aloe vera o comprimidos de Zanahoria.

De todo lo que os he contado y para cualquier consulta que queráis realizarme, me encuentro en Herboristería Artesanía de la Salud, en Travesía Eugenio Úbeda, cerca de la Biblioteca Pilar Barnés.

Pasad un buen verano y tened presente que lo natural es cuidarse.